En un acto más de depravación antifilosófica que ningunea las más acaloradas disquisiciones dialécticas de Ludwig Feuerbach, la élite alemana, aterrorizada por la repugnante y podrida imagen de su propia esencia, intenta cubrir con un manto teológico, antihegeliano y contrarrevolucionario, las vergüenzas de su nefasto dominio corrupto, entronizando a un nuevo cura-presidente de la antigua RDA. El IV Reich, como ya hicieran sus antecesores a lo largo de la historia, proyecta así sus imposibles e inalcanzables deseos de probidad, decencia y humanidad, sobre los Papas, teólogos y curas de una religión que solo puede sancionar y santificar el canibalismo connatural de los explotadores... Amén...!!!N.B: Censurado en kaosenlared.net
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