Sunday, 28 October 2018

Contabilidad de Clases: 'Body Count' y Traición Izquierdista


Es costumbre, entre los explotadores y sus lacayos, culpar al comunismo, es decir, a la resistencia obrera contra sus desmanes, de millones y millones (100 millones de muertos), de víctimas a lo largo del S.XX, en busca de una desesperada descalificación y condena de la única ideología que les puede hacer frente con éxito. Esta filfa de la mitología burguesa más criminal y cretina, alimento de zafios y engreídos, es fácilmente refutada con una somera revisión de las cifras de muertos (no es necesario contar mutilados y heridos), 'producidos' en algunos de los conflictos de los explotadores solo desde 1914: 

- Primera Guerra Mundial... 20 Millones de muertos. 

- Pandemia de Gripe 'Española', creada en las trincheras de la IGM y así llamada en un esfuerzo propagandístico de los explotadores para no relacionarla con su Guerra Mundial... 100 Millones de muertos (Estos deben ser los 100 millones de muertos de los que tanto hablan los explotadores y que achacan al comunismo). 

- Guerra Civil e Intervención en Rusia... 12 Millones de muertos. 

- Guerra Civil Española... Medio Millón de muertos. 

- Segunda Guerra Mundial... 85 Millones de muertos, etc, etc, etc... 

Es necesario, sin embargo, poner en perspectiva esta contabilidad funeraria y explicar su desarrollo. 

La historia del S. XX no es más que la historia de una larga y sangrienta lucha entre explotadores y explotados. La infiltración izquierdista (revisionista) del Movimiento Obrero 'socialdemócrata' internacionalista auténtico (Marxista), a la que nos enfrentamos también hoy en día, hizo posible la traición de la II Internacional y el estallido de la Primera Guerra Mundial y, como consecuencia directa, el surgimiento del temido 'comunismo' (Lenin no era más que un líder socialdemócrata internacionalista auténtico, 'ayudado' por el Estado Mayor Alemán, que llegó a Rusia días después de que un desprestigiado anti-internacionalista Plejanov, el hombre del Estado Mayor Británico, lo hiciera). 

El comunismo es, por tanto, una consecuencia directa y lógica de la explotación 'capitalista' y todos sus 'crímenes y excesos', una manifestación e imagen de la resistencia extrema ofrecida por los explotadores al proletariado internacional. No es extraño, por tanto, que, cargados con tanta culpa, los 'capitalistas' y sus lacayos quieran descargar sus onerosos crímenes y abusos sobre las amplias espaldas de sus explotados.

                                     
                                     
                                    comité espartaco