La fiesta caciquil sin solución de continuidad ante un movimiento de 'protesta' nazi-izquierdista neoliberal.
Mientras el fúrgol o eso que algunos llaman fútbol, ocupa toda la atención del populacho cortijero, las pocas energías no consumidas por el circo nacional, han parido un movimiento de 'protesta' que busca, positiva y desesperadamente, hacer tortillas sin romper los huevos, es decir, hacer la 'revolución' sin revolución, sin molestar a los amos, sin importunar a la caciquía o fastidiar al patrón.
Mientras las últimas remesas de inmigrantes son importadas, descaradamente y con la ayuda del ejército cortijero-español, por la oligarquía que nos aplasta y gran parte de la población es expulsada al exterior por su corrupto y depravado régimen, nuestros aguerridos, pero pacifistas, muchachos revolucionarios, nos prometen no ya una utopía liberal, sino una ultraliberal (ver manifiesto http://plataformaenpie.wordpress.com/), sin duda, con las requeridas genuflexiones y encantamientos propios del nazi-izquierdismo patrio, pero a fin de cuentas, ultraliberal, pues 'la libre circulación de las personas en todo el planeta', es decir, la liberalización de los movimientos migratorios que ellos reclaman, no es otra cosa que la mismísima recomendación del capitalismo más salvaje y explotador (ver http://www.expansion.com/2012/08/09/economia/1344528725.html?a=OPE850a1fc2647db0ff2ca6b420cd048fa8&t=1344612159 o http://www.ecb.int/pub/pdf/mobu/mb201208en.pdf especialmente página 62), ese que nos conduce, sin titubeos o piedad, al diezeurismo o la esclavitud del campo de concentración.
Pero no hay que perder la esperanza pues, es bien conocido que, las verdaderas revoluciones, no las empiezan los verdaderos revolucionarios...
¡Caciques al GULAG!
Workers of the World, Unite!
¡Reciprocidad! ¡Repatriación! ¡Revolución!