La independencia y el nacionalismo como espoleta revolucionaria.
¿Qué lacayo, qué mucamo, querría ser pringoso miembro de un cortijo corrupto y hediondo como es Cortijo-España? ¿Qué bestialidad, qué cobardía podría doblegar la voluntad secesionista de aquellos que, al menos, quieren deshacerse de unos cuantos caciques y sus repugnantes paniaguados y pinchaúvas?
La independencia que muchos ciudadanos reclaman para sus regiones, no puede resolver la guerra de clases, pues solo los proletarios armados podrían hacerlo, pero sí podría avanzarla en un sentido positivo para los trabajadores de todas las Taifas, debilitando la solidaridad y las bases de poder y riqueza de la caciquía (no hay que olvidar que estos corruptos zánganos tienen propiedades y botines repartidos por todo el cortijo), forzándola a lo que más miedo tiene: a luchar por su supervivencia, a arriesgarse a sacar los tanques y cañones, como en Libia o en Siria y luchar para defender los frutos de su robo y expolio, es decir, a jugarse el cuello en un conflicto que, sabe muy bien, podría perder o no sobrevivir para disfrutar de la 'victoria'...
ETA y el terrorismo izquierdista y nacionalista, solo fueron inventos de los caciques para entretener y amedrentar a la ciudadanía durante la Transición y forzar a los militares a mantenerse fieles a la dominación caciquil y evitar así una nueva Revolución de los Claveles. Es por eso que, aunque parezca paradójico, la independencia es hoy más factible que cuando esas organizaciones operaban en la semi-impunidad permitida.
La crisis ha puesto al descubierto las esenciales rivalidades de la caciquía, las amargas y enconadas luchas entre capitalistas, feudo-capitalistas y demás castas que componen la oligarquía que nos aplasta. Los proletarios hemos de ayudar a que esta canalla de 'to lo que lleva entro'... y fomentar toda lucha, por pequeña que sea, que pueda desgastar a nuestros enemigos. Nosotros no tenemos miedo a ninguna independencia, pues nuestro internacionalismo supone y supera ya cualquier nacionalismo. Nosotros no tenemos miedo a NADA. Somos obreros. ¡¡¡SOMOS PROLETARIOS!!!... ¡¡¡SOMOS LA GUERRA DE CLASES!!!... ¡¡¡SOMOS LA DICTADURA DEL PROLETARIADO!!!
¡Caciques al GULAG!
Workers of the World, Unite!
¡Reciprocidad! ¡Repatriación! ¡Revolución!
