Monday 12 August 2013

Más allá de Ayala


Pueblo mexicano, apoyad con las armas en las manos este Plan, y haréis la prosperidad y bienestar de la Patria.
Libertad, Justicia y Ley. 
Villa de Ayala, Estado de Morelos, 28 de noviembre de 1911.







Marxismo y armas para los trabajadores de México. 

Sabedora de su culpabilidad criminal en todo tipo de fechorías, la oligarquía sigue sometiendo a México con una cruenta dictadura de fuego y terror, con la que intenta anegar en sangre y destruir todo tipo de oposición política o pensamiento revolucionario de sus trabajadores. 

El reciente secuestro, tortura y asesinato de los camaradas comunistas Raymundo Velázquez Flores, Samuel Vargas Ramírez y Miguel Solano, pone de manifiesto, no solo la desesperada situación de un México saqueado y mortificado sin piedad por la canalla caciquil, sino, lo que es aún más importante para los comunistas, las deficiencias materiales, organizativas e ideológicas del PC en México. 

En el tiroteo generalizado que es México, aunque también en las regiones más 'civilizadas' y democráticas (No olvidemos, por ejemplo, los asesinatos de los líderes derechistas en Holanda o Austria hace unos años), los comunistas no pueden cometer el error de ser los únicos que caminan desarmados. La protección de su capital humano, ha de ser una prioridad ineludible para el PC. Sin duda, las dificultades materiales pueden ser enormes, pero la obtención de armas (Pistolas, revólveres, escopetas recortadas, etc... quizás comprando a los cárteles, de contrabando o de propia fabricación) y entrenamiento para la protección de los militantes y de sus movimientos en un país como México, es absolutamente necesaria, pues es la única forma de evitar un seguro exterminio. 

En el terreno organizativo, el PC en México debería actuar de manera más anónima, clandestina y soterrada. Intentar organizar grupos vigilantes y zonas 'seguras' (barrios, pueblos, aldeas, monte), así como redes de espionaje y alerta avanzada, métodos de protección y seguridad generalizados y, cuando sea posible, uso intensivo de las telecomunicaciones para evitar desplazamientos por zonas 'inseguras'. 

En el terreno ideológico, se necesita más marxismo y la eliminación del izquierdismo, el pacifismo y el populismo 'sincrético' y 'mágico'. Más crítica y menos mirar al culo de regímenes disfrazados de comunistas o a los babosos izquierdistas. La venganza, la justicia y la retribución proletarias han de ser objetivos reales, tanto por su valor propagandístico, como moral y deberían ser fomentadas y propagadas entre la población trabajadora. En la guerra de clases, especialmente en un régimen terrorista como el de México, solo una concepción militar de la lucha puede salvar la situación y el pellejo. 

El comunismo es difícil y peligroso, como las muertes de Raymundo, Samuel y Miguel y de millones y millones de trabajadores alrededor del mundo, muestran una vez más... y es peligroso porque los explotadores saben que el comunismo, es la única fuerza que puede destruirles. ¡Adelante!


¡Caciques al GULAG!
Workers of the World, Unite!
¡Reciprocidad! ¡Repatriación! ¡Revolución!